miércoles, 17 de septiembre de 2014

Todo lo que necesitas.

Hablan de lo maravilloso que es conocer a tu media naranja, lo bonito que es compartir cada uno de tus momentos más especiales con esa persona que ilumina tus ojos y saca las mejores de tus sonrisas. Pero... ¿cómo saber a ciencia cierta cada una de estas cosas cuando no lo has vivido? ¿Cómo saber que hay alguien allí fuera esperándote para decirte todo lo que necesitas oír?

Las cosas llegan, la vida te sorprende y, detrás de todas las malas situaciones, de momentos humillantes, de tus ganas de llorar, incluso de tus ganas de reír para afrontar tus propios miedos, apareciste tú. Tú en todos los aspectos buenos que deseaba tener, tú en todos los sentidos, simplemente tú, y es que nadie más que yo podría entender lo que significa pasar un minuto a tu lado.Y ahora que te tengo, si te pierdo, me pierdo después.

Echas la vista atrás, piensas en todas esas personas que te han hablado de lo que es el amor, de todas las lecciones que te han intentado dar, y te quedas callado. Y piensas. Y te ríes. ¿Y qué coño saben ellos del amor si no saben lo que es tenerte entre sus brazos? En la vida llega un momento en el que comprendes algo, el amor no es teórico, es una situación práctica, y hasta que no la vives no tienes ni puta idea de lo que significa y todo lo que conlleva.

Que no hay un te quiero más sincero que el que sale de tus labios.


jueves, 21 de agosto de 2014

Me he perdido, y te he encontrado.

Me perdí un 19 de Diciembre entre los más dulces labios que jamás había probado.

Me he perdido y no encuentro una salida, me he perdido y no quiero encontrar esa salida. Si alguna vez consigo escapar de este laberinto llamado 'amor' deseo que estés en la salida, con los brazos abiertos para volver a encerrarme en él. No me imagino un mundo en el que no pueda mecerme en tus brazos, en el que no pueda mirarte a los ojos y sonreír.

Me he perdido en las calles de Sol, pero estabas agarrada a mi mano. He mirado hacia la derecha y, luego, hacia la izquierda y, a pesar de la muchedumbre inquieta de las calles de Madrid, solo he podido ver el brillo de tus ojos sobre los míos. 

Me he perdido en tu cama, y hemos empezado la mejor de las batallas, en las que solo eran testigos tus sábanas. Y qué mayor placer que el hecho de poder besar cada parte de tu espalda y, sentirte y, disfrutarte y, amarte. Siempre amarte. 

Me he perdido en los 7 minutos que espero un tren mientras el tuyo va camino de Aranjuez. Vibra mi móvil, y tengo una conversación, 'me acabo de ir y ya te echo de menos', y es en ese momento en el que me he encontrado.

Y qué coño, te he encontrado.

lunes, 11 de agosto de 2014

Soñar(te).

Te soñaba cuando aún no visualizaba tu rostro, cuando no había probado el sabor de tus labios, cuando no sabía lo que era sentir tus manos por cada rincón de mi cuerpo. Soñaba con ese 11 de Diciembre en el que los rayos del Sol fueron testigos del más fiel de los besos, de mis labios sobre los tuyos, de mis manos en tu cadera, de la rapidez de las pulsaciones de mi corazón y de lo cerca que te sentía.

No soy capaz de explicar la felicidad que da esto del amor, no sé qué diablos viste en mí, pero bendita sea la hora en la que nuestros caminos se cruzaron.

Tan solo sé que eres la única en mi vida, eres como las risas que acompañan nuestras guerras de cosquillas, eres como la luz que ilumina las tardes lluviosas del invierno madrileño.

Porque soñaba contigo sin conocerte, porque sueño contigo teniéndote.

martes, 15 de julio de 2014

Solo soy yo si estoy contigo.

Los días pasan, las horas pasan y, así y como pasan los minutos, me estoy acordando de ti. Me estoy acordando de ti en todos y cada uno de los minutos de mi vida, porque desde que apareciste en ella me has dado algo que nunca me ha dado nadie: felicidad. Es cierto que son doce días, no es para tanto pensarán algunos, pero para mí es una eternidad, me he acostumbrado a ti, a tus abrazos, a tus besos, a cada una de tus risas y a todas tus historias.

Si pudiera pedir un deseo sería que siempre estés en mi vida, que a pesar de cualquier adversidad nunca te sueltes de mi mano, que detrás de cada lágrima venga la más larga sonrisa. Que no voy a olvidar todas nuestras tardes en Sol, o cómo intento coger el mismo tren que tú y luego me equivoco, cómo me intentas dar un beso y luego te quitas para hacerme de rabiar, o tu preciosa sonrisa cada vez que nos vemos. Que sé que no soy el más perfecto pero, créeme, nadie te quiere ni nadie te querrá nunca como lo hago yo.

Todavía no me he ido y ya te echo de menos, que van a ser muchos los kilómetros que nos separen, pero siempre voy a estar para ti, siempre voy a estar contigo. Gracias, gracias por todo lo que me aportas, lo que te voy a echar de menos no está escrito, y sé que cuando leas esto vas a estar recién despierta, pero no se me ocurría una mejor manera de despedirme y demostrarte cómo te quiero y cuánta falta me haces.

Porque solo soy yo si estoy contigo.

Te quiero.